jueves, 14 de junio de 2007

El rey de los deportes

Según las estadísticas publicadas por cierto concurso televisivo, sólo el 26% de la población española es aficionada al fútbol. Si creemos a pies juntillas ese dato, resulta sobredimensionado el tratamiento que se le da a dicho deporte en cualquier ámbito.

Puede que el fútbol, como tal, atraiga a más proporción de gente que esa cuarta parte de la población, pero los esfuerzos realizados por su afición comparados con los resultados obtenidos serían objeto de una exhaustiva auditoría, o incluso a la amortización de dicho departamento (de fútbol) en cualquier multinacional que se precie.

Los grandes equipos de fútbol representan más bien poco a las ciudades que les acogen, mucho menos a sus naciones. Suelen ser un grupo de mercenarios individuales con contratos privados para vender camisetas o similares. Luego, los seguidores, hinchas, forofos, aficionados, etc… (adjetivos utilizados en función de su intelecto más que de su poder adquisitivo) les recriminan porque “no sienten los colores del equipo”.

Ja (risa irónica) Pero… Qué colores sientes tú? Hablas de honradez, honor, coraje… Lo has leído en el diccionario o demandas algo que tú practicas? Eres honrado? Sientes las OPAs hostiles que hace la empresa para que trabajas con el mismo tesón que un directivo? Declaras todo lo que debes a Hacienda? Te llevas los folios de la oficina a tu casa? Y los azucarillos? Miserable…

No se cuánto puede costar al año pertenecer a uno de estos clubes, pero, si seguimos con las proporciones… Nos cuestan mucho más los impuestos que seguramente esa cuota y exigimos mucho menos a nuestros gobernantes… Pero eso, como siempre, es otra historia…

Si hablamos de selección, hablamos de controles de alcoholemia. Jamás, a ningún deportista, se le ha “cazado” con menos copas que a la selección española de fútbol. Vista como empresa deportiva, en algunas civilizaciones sería pasada necesariamente por las armas, pero si se trata de cantar o de vender camisetas la cosa cambia.

Cómo puede decir la prensa deportiva que la selección española es una de las mejores del mundo, y luego ser un paquete de comida para leones de circo que rara vez llega a cuartos de final en un mundial u olimpiada?

Y es que, la prensa deportiva, vive de ello. Transmiten hasta los entrenamientos, y porque no les dejan entrar en los hoteles, que si no, también veríamos como algún delantero se corta las uñas, por ejemplo.

No sólo no se corresponde lo que pasa (en el fútbol) con lo que te cuentan, sino que además, es independiente de los resultados. Te pueden decir que tal equipo va fatal y ganar la liga, o incluso no dar ni una triste noticia de un equipo que va el tercero en la clasificación. Es un deporte que se gana metiendo goles, nada más. No te dan puntos, a parte del KO, como en el boxeo.

Entiendo que un campo de fútbol sea lo más parecido a un teatro romano (pan y circo, recordáis?) y que, por supuesto, la retrasmisión de una partida de billar o de ajedrez no tenga el mismo énfasis. Quizás el fútbol se presta más a soltar adrenalina. Pero volviendo a los resultados obtenidos por otros deportes, resulta lamentable que se ensalce tanto un deporte que aporta más bien poco a los trofeos patrios.

El fútbol es el rey de los deportes porque ahí le han puesto unos poderes fácticos. No es un rey democrático, es un rey absolutista con los otros deportes, no compite de igual a igual, y les resta protagonismo por oscuros intereses poco o nada deportivos.

Quizás alguien se frota las manos cada vez que millones de personas se paralizan y sufren y disfrutan como si les fuese la vida en ello, en vez de mover el culo y luchar por unos ideales menos superficiales y que nos afectan más a todos y cada uno de nosotros.

No hay comentarios: